Los educandos, son el resultado de quienes creen en ellos. Y si no que se lo pregunten a Thomas Edison. Puedes ver su biografía en wikipedia. Le echaron del colegio por improductivo, pero gracias al esfuerzo, cariño y dedicación de su madre, consiguió que saliese adelante. Edison es uno de los mayores inventores de patentes de la historia, Entre otras cosas contribuyó en el invento de la electricidad. En el video adjunto puedes ver su historia. También puedes verlo en https://youtu.be/
A todas aquellas personas que creen en los demás y que son capaces de diferenciar el talento, mi enhorabuena¡ A los que creen que hay casos imposibles, que revisen sus creencias y amplíen su formación. Cuando un alumno suspende, no debería ser un fracaso para el alumno, sino que es un fracaso del profesor.
Creyendo en los alumnos y haciéndoselo saber, serán más satisfactorios los resultados. ¿Cómo? Aportándoles creencias potenciadoras. Allá donde haya un caso de éxito, detrás habrá personas que han creído en ellos. También puede haber casos en los que, aún habiéndoles aportados creencias limitantes, habrán creído en sí mismos y habrán luchado hasta conseguir sus sueños. La mayoría de los humanos necesitamos que nos aporten creencias impulsadoras para conseguir nuestros fines. Las creencias son la brújula de nuestro desarrollo.
Enseñar no significa dar clase para los que entienden a la primera, enseñar es comunicar, dedicarse al otro, empatizar, entender y comprender cómo percibe la información cada alumno. La satisfacción es mayor para un adulto, cuanto mayor es el reto de un educando.